TESTIMONIOS La Maleta Filosofal

  • La Maleta Filosofal es otra novela muy entretenida, en la que ahora encontramos a Troy Moran resolviendo un escabroso
    caso en el que se mezclan tramas de poder, sectas secretas y delitos de origen sexual. La trama rápidamente cautiva y atrapa con sus dinámicos sucesos y una ágil
    velocidad en el relato, a ratos vertiginosa. Cuento aparte es la figura metafórica de la combinación de la máquina del tiempo y de la piedra filosofal.

  • Es cautivante la manera como el
    protagonista, un héroe solitario, trata a las mujeres con las que comparte la trama. Es una especie en extinción. No es fácil encontrar en estos días a alguien que actúe con tanta delicadeza, gentileza y discreción al ofrecernos un apoyo incondicional que nos haga sentir seguras y libres.

  • Me impresiona la manera como, en “La Maleta Filosofal”, el protagonista va experimentando una mutación en su perspectiva de la vida conforme va recibiendo el impacto creciente de los peligros asociados a los casos de búsqueda de personas perdidas. La sobriedad y resolución con que enfrenta esos casos lo convierten en una suerte de héroe de bajo perfil, cuya épica es narrada en forma ágil y sistemática por el autor.

  • Me gustó mucho la precisión del relato de La Maleta Filosofal. Los capítulos se suceden con rapidez y nos van introduciendo en un submundo urbano con atmósferas de gran realismo, saturadas y sorprendentes, a ratos asfixiantes. No se puede evitar involucrarse en la trama y, por momentos, ponerse en el lugar del protagonista y actuar con más resolución aun que él mismo.

testimonios Río Urbano

  • Río Urbano es una entretenida y ágil novela de misterio y suspenso, en cuyas páginas podremos gozar de los sabrosos momentos de la vida pasada y presente de Troy Moran, un residente arraigado del Barrio Bohemio de la ciudad, que al ir asumiendo una misión de encontrar a personas desaparecidas deviene en una suerte de investigador privado, cuya actividad lo va enfrentando a peligros cada vez mayores, evocando una especie
    de James Bond criollo.

  • Me parece que Río Urbano es una novela muy feminista. Me impresiona que la casi totalidad de los personajes sean femeninos. Y en casi todos los casos se trata de mujeres muy empoderadas y de mucho dominio de sus circunstancias y de mucha conciencia de sí mismas y de su entorno. También me gustó mucho la caracterización de los
    espacios urbanos y los interiores donde suceden los hechos.

  • De Rio Urbano, lo que más me gusta es la manera como cada capítulo se convierte en un episodio en sí mismo, que presenta historias propias como si fuera una mini novela, pero, al mismo tiempo van dándole forma a un relato mayor que le da vida a una auténtica epopeya urbana que nos pasea por distintos lugares y paisajes ciudadanos descritos de manera poética pero muy realista.

  • Los personajes secundarios femeninos de Río Urbano me parecieron muy interesantes. La historia nos ofrece toda una
    galería de mujeres solitarias, autónomas y apasionadas, todas muy diferentes y todas muy atractivas. Dan ganas de entender el amor como lo hace el protagonista, desde los sentimientos más sublimes hasta las prácticas más carnales, que llegan como dice Troy Moran “hasta el nivel molecular”. 

  • Rio Urbano es un entretenido libro, en el cual el Autor nos pasea con deleite, sólido conocimiento y descripción detallada por los barrios de Santiago. Sus personajes reflejan cada uno alguna característica del mismo, realzando su interés por la música y el whisky de origen gaélico y escocés.

    Cada capítulo va entretejiendo nuevas aventuras del mítico Troy y sus interesantes descripciones de las relaciones humanas.

SOBRE EL AUTOR

Juan Carlos Román Güiraldes

Soy Arquitecto y ejerzo mi trabajo profesional en forma independiente mediante mi empresa de asesorías externas, Ámbitos Consultores, a través de la cual ofrezco servicios de Gestión y Diseño Urbano, Arquitectónico y Paisajístico, desde hace casi tres décadas.

Mi trabajo literario surge de la temporalidad de mi ocio creativo, que en los últimos años ha priorizado la narrativa por sobre la interpretación musical, que antes concentraba la casi totalidad de la energía de las ventanas horarias extralaborales. Así, el quehacer colectivo de bandas y coros dieron paso a la soledad vertiginosa del relato de ficción en contexto realista, en el género que más amo, desde que tengo uso de razón: el thriller.

Las historias surgen de todas partes, de la vida misma, pero por sobre todo del propio lenguaje. Los personajes emergen del humus de las tramas, en contextos de fertilidad, o de la aridez misma, en instancias de desolación. Ellos son unos bots que rápidamente cobran vida propia y manejan sus propias interacciones. Yo sólo aspiro a ser como el perro ovejero, que los lleva a pastar y luego a un lugar seguro donde descansar. Asumo que la intensidad de los espacios urbanos o los interiores caracterizados constituyen personajes escenográficos que bien pueden definir o torcer el destino de los sucesos narrados y de sus actores.

Quisiera ser el dueño absoluto de mis tiempos de trabajo literario, pero dependo, felizmente, sólo de las disponibilidades que permite mi dedicación familiar y laboral. En ese contexto, el desvelo es un gran aliado para avanzar con firmeza en las narraciones que acometo.